La Provincia 29/09/2019
Una experiencia que va más allá de lo que ofrece un festival de formato medio en el mercado insular, con un evento que busca fortalecer la marca, dentro y fuera de Canarias, para posicionarse con un nombre propio y oferta diferenciada en el circuito nacional.
Con estos atractivos se presentaba ayer el segundo envite del Gran Canaria Sum Festival. A la espera de conocer cuántos espectadores se trasladaron desde la Península -el año pasado fueron 2.700- los números de esta segunda edición apuntan a una afluencia superior en el conjunto del público: el dato que manejaba la organización, anoche y sobre las 22.00 horas, eras de unos 7.000 aproximados, cuando quedaban por actuar los cabezas cartel: Fangoria, el dúo de Alaska y Nacho Canut, en la gira de su treinta aniversario; Elefantes, con Shuarma, al frente, que repetía por segundo año consecutivo; la banda escocesa Texas, que tenía previsto salir al escenario a las 1.00 horas; y Carlos Sadness, a las 2.30 horas.
El Sum Festival busca fortalecer marca y fidelizar público. Prueba de ello es que anoche se ofertaba la entrada para el próximo año, el 26 de septiembre, al precio de 15 euros, sin conocer el cartel. Además.la organización anunció la vuelta del Bikini Pop en mayo de 2020; y un nuevo festival que asoma en el horizonte: World Music Gran Canaria, en enero próximo.
Infecar, que en la memoria se antoja como un espacio hostil para un festival de este tipo, se transformó a conveniencia del Sum en un recinto cómodo para el público, con dos escenarios bien resueltos en lo técnico y visual, en los que se sucedían los conciertos, sin solaparse, con precisión británica. Y zonas derestauración, descanso y servicios acorde al aforo.